RESEÑA

DIFERENTES TONOS DE ROJO, DE FACUNDO DELL AQUA: EL MIEDO EN
DEGRADÉ

Ideal para quien le tiene miedo al miedo, este conjunto de relatos no navega por el gore o lo aterradoramente sobrenatural. También son perfectos para quien gusta del género porque este libro hace juego con su título y se arma con matices, sutilmente distintos, de la misma materia prima: el terror.

POR: MARTÍN GAGLIANO

“Esta es mi alarma Todo-Está-Bien”, grita Homero Simpson para hacerse oír sobre un chillido constante y aclara: “sonará cada tres segundos a menos que algo no esté bien”. Los seis cuentos que arman Diferentes tonos de rojo, de Facundo Dell Aqua, suceden en el preciso momento en que la alarma deja de sonar. El instante en el que las cosas pasan a no estar bien de una vez y para siempre.

El conjunto de relatos se sostiene en base a los personajes de cada historia. Son distintos, pero similares. No solo por estar donde están o enfrentar lo que enfrentan, sino por la forma en que se relacionan con el mundo. El autor trabaja bien la lógica personal de cada uno y queda claro por qué toman cada decisión, aunque puedan ser irracionales. Por ejemplo, en Un motor ruge en el silencio el protagonista avanza en su camino aun cuando se da cuenta de que nada tiene explicación posible. O como pasa en el cuento que da título al libro, donde el narrador, a pesar de encontrarse en una constante que le resulta absurda, no es capaz de detenerla.

Perderle el miedo al miedo es un ejercicio que en general no se puede hacer de golpe. A veces hay que aclimatarse. Diferentes tonos de rojo es un buen umbral para iniciarse en el género horror. Ideal para quien le tiene prejuicio, sirve para probar sin riesgo gore, sumergiéndose en buenas tramas. El estilo de este conjunto de cuentos, con historias breves donde lo sobrenatural se hace presente de forma sutil, es una forma de meter un pie en el agua para ver si se está lo suficientemente a gusto como para zambullirse.

Quien lee descubre junto a los protagonistas de qué forma se altera el universo y por cuál rendija se cuela eso que asusta, que muchas veces a lo largo de estas historias tiene que ver con la imposibilidad de volver atrás. Para cada cuento hay un contexto actual que está jodido de una u otra forma y con eso hay que convivir, encontrar sentido en donde no parece quedar nada más. Son relatos que mantienen el suspenso y no apelan a lo grotesco para asustar.

Por ejemplo, El flautista a medianoche muestra la fragilidad de lo que se suele llamar hogar y cómo el paraíso aparentemente conquistado puede transformarse en la peor pesadilla. En El precio del desierto se devela un enigma ancestral que vincula los destinos de un padre y su hijo. El que sueña entre las estrellas enfrenta a terrores atávicos inconmensurables. Y en Mi amor yace bajo luces tenues se descubre que el karma obra de maneras misteriosas. La tipografía como de película de terror, las ilustraciones y el rojo en varias capas del arte de tapa, a cargo de Nicolás Rodríguez, anticipan certeramente la esencia de este conjunto de cuentos.

Lejos de ser solo existenciales o reflexivas, las historias están repletas de acción. Cada relato va al hueso. Además, hay una variedad de escenarios, como el desierto de Nevada o la frontera con México en Estados Unidos, un departamento en el piso 17 de una torre en Puerto Madero o un barrio de casas bajas en el conurbano bonaerense; con marcadas referencias a lenguajes que se acercan al cine, la novela gráfica o la animación.

Este cruce no es casual. Facundo Dell Aqua es, además de escritor, guionista de cine y de historietas. También hace reseñas de videojuegos, libros, películas y series en su cuenta de Twitter y en su canal de Youtube, Llevamos el fuego. Parte de ese material lo usó para construir su primer libro, Los gigantes (Malisia Editorial, 2017). Y así como esa novela está atravesada por un cúmulo de referencias a la cultura geek y a la música, en Diferentes tonos de rojo hay un link con el western, o las road movies.

Además de cierto espanto posible, lo que abunda en Diferentes tonos de rojo es la naturaleza humana desplegada en varios matices. No hay criaturas monstruosas o sustancias caídas desde el espacio. En estos relatos, son las personas reales las que asustan. En el cuento que da nombre al libro, el autor habla de seres “exiliados de cualquier tipo de normalidad” y esa caracterización ayuda a entender desde dónde Facundo Dell Aqua construye todos y cada uno de sus personajes. Y también cuál es el punto de partida: cómo sobrevivir una vez que se cruza ese margen.

¿Es un libro para leer antes de dormir? Sí.

Las historias de Dell Aqua asustan, pero de algún modo también llevan la tensión hacia lo conclusivo. Eso permite respirar de nuevo antes de apagar la luz. Hundir la cabeza en la almohada y relajar, aun en la contradicción del sonido de la alarma inventada por Homero Simpson, que incomoda, pero a la vez asegura que todo está bien otra vez.

Diferentes tonos de rojo (Malisia Editorial, 2020),
de Facundo Dell Aqua.

Se consigue en físico y en digital.

ILUSTRACIÓN: CECILIA MARTÍNEZ RUPPEL
FOTO: GENTILEZA FACUNDO DELL AQUA